Boletín de Prensa No. 146
Quito D.M, 24 de abril de 2017
La activación social gracias al recuperado Mirador de Guápulo
Más de sesenta actividades educativas, sociales, culturales, lúdicas y gastronómicas se han desarrollado en el primer año de apadrinamiento del Mirador de Guápulo, recuperado para fomentar el turismo, el buen uso, y la innovación del espacio público a través de la cooperación de la Fundación Libera Ecuador y el Municipio de Quito.
En febrero de 2016, previamente a que la Fundación participara de la reactivación social del Mirador, la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas - Epmmop, realizó obras de rehabilitación integral de este espacio que se encontraba abandonado y destruido por varios años. Con estos trabajos se optimizaron jardineras, escalinatas, áreas verdes, mobiliario, arbolado y se dotó de nueva luminaria como elemento fundamental para la seguridad de este espacio turístico.
Para Pedro Bermeo, representante legal de la Fundación Libera, "el motor principal de la vitalidad del parque es la comunidad, desde la visión de crear espacios de vida han logrado la vinculación de los moradores y miembros de la organización en los proyectos y actividades de apropiación del espacio público, como un referente turístico por su extraordinaria vista hacia el valle nororiental y la apreciación del tradicional e histórico barrio de Guápulo".
Actualmente el parque recibe entre 300 y 500 visitas diarias, principalmente los fines de semana, cuando las familias aprovechan del ambiente natural, los espacios recreativos, las huertas y sobre todo la degustación y motivación del consumo de alimentos consientes, de un variado menú de comida vegana del restaurante Tandana, una instancia sin fines de lucro, que ha destinado sus ingresos al apoyo a la comunidad, lo que ha generado empleo y valorado las iniciativas autosustentables, cuyos principales beneficiarios son los habitantes de Guápulo.
Los alimentos orgánicos utilizados en el restaurante, son producto del emprendimiento de los huertos familiares de Guápulo, principalmente de mujeres, madres y líderes, a quienes se les capacitó en técnicas de siembra y cosecha, para que hoy sean uno de sus proveedores exclusivos. A decir de la infraestructura, su elegancia y diseño acogedor se caracteriza por la composición de múltiples elementos reciclados (sillas, mesas, vajilla, decoraciones y más detalles), elaborados por voluntarios y activistas de la fundación y otras organizaciones cooperantes que le apostaron a transformar Guápulo.
Desde la visión de derechos e inclusión social, la fundación ha generado varias alternativas laborales en torno a la activación del parque. Por ejemplo, el mantenimiento de espacios verdes, limpieza, jardinería y otras actividades de conservación del espacio físico del Mirador, los realiza uno de los habitantes del barrio, un adulto mayor que conserva su vitalidad y fuerza gracias a la oportunidad de sentirse útil y ser el sustento de su familia con su trabajo.
A través del compromiso ciudadano, se puede garantizar espacios públicos de calidad, amigables, limpios, bien cuidados, con la responsabilidad compartida de las entidades municipales y las familias quiteñas.
EPMMOP
Obras para vivir mejor